Como era de esperar, cada vez se filtran más detalles sobre la tecnología de los dos primeros vehículos de M GmbH, equipados con tracción total, transmisión automática y motores turbo.
El comunicado de prensa oficial nos cuenta todos los detalles sobre el motor, la caja de cambios, la tracción total especial y el diseño de los vehículos. Por supuesto, también hay montones de fotos de alta resolución en nuestra exposición fotográfica.
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Motor
Tanto el BMW X5 M como el BMW X6 M están propulsados por un propulsor cuya base técnica es el motor ya conocido del BMW 750i y del BMW X6 xDrive50i.
El motor tiene una cilindrada de 4,4 litros y está alimentado por dos turbocompresores TwinScroll. Al igual que en el modelo básico ya conocido, ambos turbocompresores y los catalizadores cercanos al motor están situados en el espacio entre las dos bancadas de cilindros, es decir, «en V», por así decirlo.
La inyección directa también se utiliza en la versión M, conocida en BMW como High Precision Injection. Esta configuración da como resultado 555 CV a 6.000 rpm y un par máximo de 678 Newton metro, que ya está disponible desde 1.500 rpm.
BMW promete un turbo lag apenas perceptible, así como una entrega de potencia muy uniforme. Esto será posible gracias a un suministro más uniforme de gases de escape a los turbocompresores, denominado Cylinder-bank Comprehensive Manifold (CCM), en el que un turbocompresor no es responsable de una bancada de cilindros, como suele ser el caso. En su lugar, se forman parejas que permiten abastecer a los turbocompresores de la forma más uniforme posible.
Los dos turbocompresores funcionan a una presión máxima de 1,5 bares. También fue necesario un sistema de refrigeración especial para el motor, que sigue siendo tan exclusivo de las versiones M como la tecnología CCM. El motor alcanza los valores de emisiones de escape de la clasificación EU5.
Caja de cambios
Entre el motor y las ruedas se sitúa una transmisión automática de 6 velocidades denominada M Sport-Automatic, que puede accionarse mediante levas de cambio en el volante. Además del modo automático normal, también hay un modo deportivo y un modo manual en el que la transmisión ya no cambia de marcha sin la orden correspondiente.
Al cambiar a la siguiente marcha superior, los cilindros individuales se desactivan para reducir las fuerzas que actúan en la transmisión. Esto significa que con esta transmisión también se pueden conseguir tiempos de cambio enormemente rápidos, aunque no se trate de una transmisión de doble embrague.
El Launch Control, conocido de varios modelos M, también está presente de nuevo y permite una aceleración óptima desde parado. Para activarlo, el conductor debe realizar algunos ajustes, como en los modelos SMG, y activa el lanzamiento levantando el pie del pedal del freno.
Tracción a las cuatro ruedas
Como en otros modelos con xDrive, la potencia se distribuye electrónicamente a las cuatro ruedas. Gracias a la distribución inteligente de la potencia, las intervenciones del Control Dinámico de Estabilidad pueden evitarse aún más y sólo tienen que producirse bastante más tarde que con la tracción convencional.
Al igual que el BMW X6, las dos variantes M del BMW X5 y del BMW X6 también incorporan el conocido Dynamic Performance Control DPC, que distribuye la potencia de forma variable entre las ruedas traseras y, por tanto, puede influir positivamente en la dinámica de conducción.
En comparación con el BMW X6 «normal», sin embargo, el potencial dinámico de xDrive y DPC se ha incrementado una vez más, entre otras cosas, cambiando significativamente la distribución de la potencia a favor de las ruedas traseras. Como en todos los modelos M, en estos dos el DSC puede desactivarse por completo con sólo pulsar un botón.
Gestión del chasis
Ambos vehículos cuentan con suspensión neumática en el eje trasero. La Gestión Integrada del Chasis ICM también controla la Estabilización Activa del Balanceo ARS y la Conducción Adaptativa con el Control Electrónico de la Amortiguación EDC. En comparación con los modelos X5 y X6 normales, los Ms son 10 milímetros más bajos.
También dispone de dirección asistida en función de la velocidad, que facilita las maniobras de aparcamiento, por ejemplo, pero requiere mayores ángulos de giro y mayores fuerzas de dirección a velocidades más altas.
En el modo M, que puede activarse a través del iDrive, la dirección se vuelve aún más directa y el chasis más duro. Esto elimina casi por completo la tendencia del vehículo a balancearse en las curvas.
En cuanto a la elección de los neumáticos, resulta interesante y sorprendente que M GmbH equipe por primera vez vehículos con neumáticos run-flat. Como todos los neumáticos run-flat, los neumáticos 275/40 R20 delanteros y 315/35 R20 traseros pueden circular durante una cierta distancia sin presión de aire.
Prestaciones de conducción y dimensiones
Ambos vehículos son capaces de acelerar desde parado hasta 100 km/h en 4,7 segundos. La velocidad máxima está limitada electrónicamente a 250 km/h. El paquete M Drivers puede adquirirse con un coste adicional. Sin embargo, por un coste adicional, puede adquirirse el paquete M Drivers, en cuyo caso la velocidad máxima es de 275 km/h.
Todas las fotos del BMW X5 M y BMW X6 M se pueden encontrar en nuestras galerías de fotos. Los precios alemanes en comparación con los competidores más importantes se pueden encontrar aquí.